Cada día, miles de mujeres atraviesan el puesto fronterizo que comunica Marruecos con la ciudad autónoma de Ceuta, para proveerse de mercancías dispuestas en pesados bultos y transportarlos por el pasaje fronterizo a pie, en un comercio que mueve millones de euros y del que se benefician los comerciantes de ambos territorios. Mujeres marroquíes cargan sobre la espalda paquetes de decenas de kilos, sorteando golpes y avalanchas debido a que Marruecos no reconoce a el paso de Ceuta como frontera comercial, convirtiendo esta practica en un medio de subsistencia para ellas y un lucrativo negocio para empresarios de uno y otro lado de la frontera.

Frontera. © Paco Guerrero.
La situación de las porteadoras comporta graves violaciones de los derechos humanos y la vulneración de los tratados y convenciones internacionales firmadas por los reinos de España y Marruecos, una situación invisible a los ojos de Europa y de los medios de comunicación.
Porteadoras, el documento que presenta Maite López Vazquez en el marco de la Jornadas Derechos Humanos, Desarrollo y Ciudadanía, refleja la vulnerabilidad de la trabajadoras transfronterizas dedicadas a portear bultos en la frontera ceutí.
La proyección está prevista para el viernes 16 de septiembre, en el Iglesia de Santa María, de Tarifa, Cádiz.